APORTARA 2500 SOLDADOS A LA FUERZA DE PAZ EN EL LIBANO, PERO PIDE APOYO Y GARANTIAS
Italia se hace cargo y pone condiciones
Mientras continúa el emplazamiento de tropas libanesas en la frontera y se mantiene el alto el fuego, Roma negocia con sus pares europeos apoyos militares y con Israel, garantías de que la tregua se mantendrá. Kofi Annan discute una nueva resolución de la ONU sobre el mandato de la fuerza y Finlandia convocó una reunión de la Unión Europea.
Por Enric González y Ana Carbajosa * Desde Bruselas y Roma
Mientras los quince mil soldados libaneses terminaron ayer de desplegarse en los diversos puntos del país para cumplir con la resolución 1701 de la ONU, Italia exigió garantías para encabezar la tropa internacional de paz. La primera, que Israel respete rigurosamente el alto el fuego. La segunda, que los otros miembros de la Unión Europea (UE) aporten tropas y un firme apoyo político. La reunión que los ministros de Exteriores de la UE y el secretario general de la ONU, Kofi Annan, celebrarán el viernes en Bruselas debe dar la señal de partida para que unos 2500 soldados italianos y unos 5000 de otros países europeos, entre ellos España, emprendan el viaje al Líbano. En tanto, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, dijo que levantarán el bloqueo aéreo y marítimo a ese país cuando se despliegue la fuerza internacional en la frontera sirio-libanesa.
Massimo D’Alema, ministro de Asuntos Exteriores, fue rotundo en declaraciones al diario La Repubblica: “De Israel esperamos un compromiso renovado, y esta vez realmente vinculante, de respetar el alto el fuego. Es justo exigir que Hezbolá deponga las armas, pero no podemos enviar nuestros soldados a Líbano si el ejército israelí sigue disparando”. El primer ministro israelí, Ehud Olmert, fue precisamente uno de los primeros en pedir a Italia que encabezase la fuerza de paz. “Es indispensable que se comprometa toda la comunidad internacional y es indispensable el apoyo rotundo de la UE y de cada uno de sus 25 miembros”, declaró por su parte el vicepresidente italiano, Francesco Rutelli. “Se trata de una misión crítica, difícil, sujeta a muchas incógnitas; no tenemos ninguna intención de marchar hacia Líbano entre el aplauso general para encontrarnos solos al cabo de unos meses”, añadió.
El ministro D’Alema explicó que Italia está dispuesta a aportar “entre 2000 y 3000 efectivos”, equivalentes a “un tercio de las tropas totales europeas”, que deberían situarse entre 6000 y 9000, dentro del total de 15.000 previsto por la ONU. El ministro afirmó que con los italianos habrá españoles, escandinavos, belgas, holandeses y alemanes, y que los franceses, que hablaron en principio de 2000 soldados y luego de sólo 200, tendrían también “una presencia importante”.
Los países de la Unión Europea mantendrán hoy en Bruselas un primer encuentro tras el alto el fuego en el Líbano, en el que tratarán de coordinar el envío de tropas europeas. A la reunión le seguirá otra el próximo viernes, en la que los ministros de Exteriores europeos debatirán junto con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, la composición y funciones de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (Finul), así como la posibilidad de aprobar una nueva resolución que regule el funcionamiento de las tropas, tal como propuso el lunes el presidente de Estados Unidos, George W. Bush. Francia cuestionó, por su parte, la idea de Estados Unidos de lanzar una segunda resolución en la que se aborde la cuestión del desarme de Hezbolá y se definan las reglas de enfrentamiento. París la considera prematura políticamente y advierte que podría retrasar aún más el proceso de despliegue de los cascos azules.
La idea es que en la reunión de hoy en Bruselas, convocada por Finlandia, país que preside temporariamente la UE, cada socio ponga sobre la mesa cuántos soldados y para qué está dispuesto a aportar al dispositivo multinacional. “La idea es tener una visión general de hasta dónde los países de la UE están dispuestos a contribuir. Pretendemos que los compromisos sean lo más amplios posible. Lo urgente ahora es maximizar la contribución”, sostuvieron fuentes diplomáticas finlandesas.
El despliegue de la fuerza internacional es sumamente importante, tanto para mantener la tregua entre Israel y Hezbolá como para lograr el cese del bloqueo impuesto al Líbano. El premier israelí, Ehud Olmert, condicionó el levantamiento del bloqueo marítimo y aéreo al despliegue de la fuerza internacional en el aeropuerto de Beirut y en la frontera sirio-libanesa, a lo que se opuso Siria. Olmert formuló estas declaraciones tras reunirse con el enviado especial de la ONU, Terje Roed-Larzen, horas después de que el Ministerio de Relaciones Exteriores libanés llamara a la comunidad internacional a interceder ante Israel para que levantara el bloqueo. Previamente, el gobierno israelí había dicho que continuarían con el bloqueo con un modo de prevenir el rearme del movimiento libanés Hezbolá, que según Tel Aviv está apoyado por Irán y Siria.
Mientras tanto, la acción siguió en los territorios palestinos. Soldados israelíes mataron ayer a tres miembros de Yihad Islámica cerca de la frontera central de la Franja de Gaza. Un portavoz del ejército israelí explicó que sus tropas los descubrieron acercándose a la valla fronteriza de una manera sospechosa por la noche, llevando grandes bolsas y en un momento se quedaron tumbados sobre el suelo. Los soldados abrieron fuego y los abatieron.
En otra acción, al menos diez tanques israelíes y vehículos armados se adentraron por la mañana temprano en el barrio de Sheja’eya, al Este de la ciudad de Gaza. Un portavoz del ejército dijo que las tropas arrestaron a cinco militantes buscados que se escondían en un edificio, incluidos dos miembros del movimiento radical islámico Hamas, actualmente en el gobierno palestino. La aviación israelí bombardeó también dos casas palestinas en el norte y el sur de Gaza durante la noche, sin que se registraran heridos.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.
0 comentarios